Unos tomates, unos pimientos, berenjena, calabacín… todo de la huerta… más natural, imposible, ni más barato. Es un plato que en Andalucía es muy recurrido porque además se hace fácilmente y es muy nutritivo.
Ingredientes (para 2 personas):
• 1 cebolleta (ó 1/8 de una cebolla)
• 4 dientes de ajo
• 1/2 puerro
• 1 y 1/2 pimientos verdes
• 1/2 pimiento rojo
• 1/2 calabacín
• 1/3 de berenjena
• 3 tomates naturales
• 100 gr. de tomate frito
• aceite de oliva virgen extra
• sal
• azúcar
Elaboración:
Picar finamente la cebolleta y el puerro, lavar bien y partir a cuadritos los pimientos (rojo y verde), pelar el calabacín y la berenjena y partir también en rebanadas de medio centímetro y después en cuadritos, rallar los tomates quitándole previamente las semillas.
Poner a pochar a fuego lento en una sartén o cazuela amplia, junto con 3 cucharadas soperas de aceite de oliva, la cebolleta y una pizca de sal. Añadir los dientes de ajo sin pelar (sólo le hacemos una rajita) y el puerro, rehogando hasta que la cebolla esté transparente.
Añadimos a continuación los pimientos rojos y verdes y rehogamos por espacio de 8 ó 10 minutos. Cuando estén a medio hacer los pimientos añadimos la berenjena y el calabacín, a fuego medio por espacio de 5 minutos. Sazonar.
Agregamos los tomates rallados con su jugo, sin semillas, dejándolos hacer por espacio de 15 minutos. Sazonar y añadir una pizca de azúcar.
Cuando observemos que todas las verduras están bien hechas, retiramos los dientes de ajo enteros, "pescándolos" de entre la verdura. Añadimos el tomate frito y le damos unas vueltas durante dos minutos. Probar el punto de sazonamiento, rectificando en su caso de sal o de azúcar, y servir.
Si es de su gusto, se puede tomar con un huevo frito o simplemente ser el acompañamiento de un plato de carne o de pescado.
Buen provecho.